Mi Parto. El día que cambio mi vida.

Eran las 4 de la mañana, 39 semanas más 6 días, me desperté confundida, tenía malestar y contracciones desde el día anterior, me sentía mojada, cuando me miré, note la cama entera mojada, había roto fuentes, una situación que no estaba en nuestros planes, pero nos indicaba nuestro inicio de parto. De esto solo sabía que si sucedía y había sangre tenía que irme corriendo a la clínica, y si era solo líquido y transparente podía ducharme y partir. Con muchos nervios me di un baño, desperté a Ricardo y mi mamá. Todo estaba listo y ya Vicente venía en camino. Del modo  que fuese ya pronto estaríamos juntos y eso me emocionaba.


Llegamos a la clínica 4;40am, tras mi primer tacto (doloroso y molesto) que me hizo una matrona (no era la mía) me dijo que no había dilatado y el cuello del útero largo, no habían muchas condiciones de parto, pero dado a que había ruptura de la bolsa de agua, tendría unas 12hrs para dar a luz  (eso depende del médico, la clínica y muchos factores). (Quiero dejar claro que tú puedes negarte a que te hagan varios tactos y confiar en tu instinto, puedes elegir que solo lo haga tu doctor, tú tienes tus Derechos, no hagas nada que te haga sentir incomoda)





ES IMPORTANTE ESTAR EMPODERADA E INFORMADA.
Me hospitalizaron en una habitación, una matrona me sugirió algunas posturas para avanzar en trabajo de parto. Llamamos a mi Dr y mi matrona, (estaba el papa en Chile, calles cerradas). Yo estaba tranquila, Ricardo también, mamá nerviosa. Yo confiaba que todo se iba a dar como soñé y para lo que me preparé. Hablaba con Vicente, le decía que faltaba poco, que trabajáramos juntos, lo alentaba a que todo estaría bien.Llegó mi amoroso doctor. (10;00am) me tranquilice, me hizo un tacto  (Nada doloroso con mucha paciencia y delicadeza) me dice que no he dilatado, que mi cuello  no está borrado y que mejor hiciéramos inducción (inyectarme oxitocina) ya sabía de que se trataba, vendrían contracciones rápidas, sería mas doloroso pero ya estaba PREPARADA para eso. Pero que sino avanzó rápido tendría que hacer una cesárea. Eran casi las 12;00am (tenía hasta las 4:00pm)

Sentí que Vicente y yo no estábamos preparados, que nuestro encuentro seria diferente, 9 meses en yoga, preparándome física, mental y emocionalmente para mi parto soñado, llevando un embarazo consciente, hicimos cursos Ricardo y yo, tuve Doula, hice todo para parir. Lloré desconsoladamente, mi esposo me contuvo, como se transforma la historia cuando te sientes acompañada. Nunca me entregue tanto a un proceso. Confíe, abrí mi corazón, revise en escasos minutos qué podría pasar, evalúe las opciones, con humildad lloré y solté mis miedos, la culpa por lo que estaba sucediendo. Tenia tantas dudas. ¿Era mi culpa? ¿había algo malo en mi? 



Sentí rabia y vergüenza conmigo misma, no quería cesárea pero era una opción. Empece a sentir miedo. Estaba empoderada para parir, sentía que era mi momento de demostrarme a mi misma que todo lo que había pasado en mi vida, era para tener fuerza en ese momento. Todo tan egoísta, solo pensaba en mi, en lo que creía era lo correcto, en lo que escuchaba en mi entorno debía pasar, en lo que el mundo pensaría de mi luego del parto. En el fondo pienso que todo lo que tenía en mente era pata reivindicarme como mujer. (sentía que pariendo sería más mujer que con cesárea, era mi percepción personal) todo se movió y cambio para mí. 

El amor siempre está presente en un proceso tan hermoso como el nacimiento de un hijo, no existe ningún escenario que pueda cambiar  el rumbo del amor y el apego que nace entre el encuentro de dos almas que han sido destinadas para estar juntos.

Entre con Ricardo a la habitación donde me prepararían para el parto, mi matrona y mi Dr estaban siempre cerca, me inyectaron oxitocina, paso poco tiempo y empezaron las contracciones, Ricardo me avisaba cada vez que venia una, lo veía en los monitores. Respiraba. Siempre que venia una contracción imaginaba que estaba en una gran ola en la playa que pronto me lanzaría a la orilla y se me pasaría. No son eternas, pensaba siempre "no es dolor, es una contracción"



Seguíamos sin dilatar suficiente y a las 2:00pm mi Dr me dice que prepararán pabellón, que haría cesárea. Me dijo que me respetaría la mayoría de las cosas que yo en consulta había pedido (pronto subo mi plan de parto para que conozcan y tengan idea de uno). En ese momento con humildad acepté la situación, empecé a sentir una paz que no podía explicar, estaba confiada que era lo correcto, y que pronto estaría mi bebé con nosotros.


En quirófano todos se presentaron, un gran equipo, todos me explicaban que me harían, que estaba pasando. Eso me hizo sentir segura y en buenas manos. Ricardo estaba ahí conmigo, mi matrona me explicaba. Siento que es lo que merecemos todas las familias que estamos viviendo un momento tan mágico, RESPETO Y COMPRENSIÓN. El anestesiologo bromeaba conmigo  (jamás tuve miedo de la anestesia, porque nunca pensé que la usaría, NO ME DOLIÓ NADA) hice lo que me pidió, relaje mis hombros, me pusieron en posición y listo, no sentía nada. 

Hablamos durante toda la operación, Ricardo ahí conmigo. De repente mi matrona le dice a Ricardo "párate, ya viene el bebé" yo estaba emocionada. No pasaron dos minutos y escuchaba el llanto de mi hijo y el de mi esposo de emoción. A las 2:57, pesando 3.215Grs y midiendo 50cm, nació Vicente Elías. Y con él nací yo de nuevo. Es un momento increíble que viví con consciencia, todo se paralizo para mi, lloré, llore de alivió y de amor, estaba como extasiada, la persona que tanto espere  y que con tanta entregue cuide en mi barriga, había llegado, inmediatamente me lo pusieron cerquita  (piel a piel) fue increíble, nada que me venga a la mente describe esa sensación de tenerlo cerca, sentir su calor. Fue mágico. 






                                                 Acaso no es demasiado amor está foto?


El estaba temblando yo estaba en una nube oxitocina, ya entendía lo que me decían conocería el amor de mi vida, solo se siente y ya, era como mi mejor sueño. Estábamos los 3 ahí. No puedo estar más agradecida. Luego se lo llevaron para pesarlo y revisarlo, Ricardo se fue con el. Cuando estaba todo bien, otra vez estuvo con nosotros. Me pasaron a sala de recuperación y ahí estuve con mi bebé inmediatamente. (Exige tener a tu bebé contigo, o que esté con tu pareja o acompañante) No sentía mis piernas aún, estaba Abrumada de tanto amor, la enfermera me lo puso en mi pecho, empezó a mamar. No puedo con lo perfecto de la naturaleza. Tantos meses se preparó mi cuerpo para ese momento. Lo veía hermoso, abrió sus ojos. Eran grises. Es tan hermoso. Me quedo con todas esas emociones. Lo revivo y me emociono profundamente. 







Vicente es mi maestro, mi gran creador, yo no estoy para enseñarle, estamos para acompañarnos y aprender juntos, a veces lo abrazo y lloro, no hay amor como el que se siente por un hijo, estoy en la etapa más bella e intensa que he podido experimentar, que bueno poder compartirla con ustedes.





Quiero agradecer infinitamente a mi mamá y a Ricardo por sostenerme y llenarme de amor y COMPAÑIA, los amo, nada sería lo mismo sin ustedes.

Con amor y respeto, gracias por leer mi historia. Los quiero Mom Jhoannaluz.

Comentarios

Entradas populares